Dos hombres en Spring, Texas, han perdido la vida tras decidir poner a prueba de manera arriesgada la función de conducción autónoma de Tesla. Para aquellos que desconocen, los vehículos Tesla cuentan con una función de conducción autónoma o piloto automático. Las instrucciones del vehículo insisten en que esta función debe utilizarse únicamente con un conductor atento al volante y preparado para tomar el control en cualquier momento; es decir, está concebida como una ayuda para el conductor, no como un sustituto. No obstante, estos hombres decidieron ignorar las normas y comprobar de qué era realmente capaz la función de conducción autónoma. Un hombre se sentó en el asiento del copiloto y otro en el asiento trasero, sin conductor en el asiento del conductor. Posteriormente, programaron un destino en el GPS y activaron la función de conducción autónoma para ver qué ocurría. Poco después de iniciar su trayecto, el Tesla tomó una curva a alta velocidad, lo que provocó que se saliera de la carretera y colisionara contra un árbol. A continuación, se incendió violentamente. Ambos ocupantes del vehículo fallecieron instantáneamente.
Complicaciones del accidente de Tesla
El incendio del Tesla resultó ser un verdadero desafío para los bomberos a la hora de extinguirlo. Las baterías de Tesla tienen tendencia a reencenderse en múltiples ocasiones, y los incendios de baterías deben extinguirse utilizando productos químicos especiales. Sin embargo, dado que los vehículos eléctricos son todavía un fenómeno relativamente nuevo, muchos bomberos no han recibido la formación y los materiales adecuados. Aunque este incendio debería haberse extinguido rápidamente siguiendo los procedimientos apropiados, los bomberos calcularon que tuvieron que utilizar cerca de 121.000 litros de agua durante varias horas para lograr que el incendio de la batería se apagara.
¿Podría Tesla ser responsable?
Parece evidente que estos hombres no estaban utilizando el automóvil ni la función de conducción autónoma de la manera prevista. Se han producido aproximadamente 24 accidentes con la función de conducción autónoma de Tesla desde el lanzamiento de los vehículos “, una cantidad relativamente insignificante en comparación con el número total de modelos aplicables vendidos. Sin embargo, este es el primer caso conocido en el que no había nadie en el asiento del” conductor. Si bien los hombres fueron absolutamente negligentes, cabe preguntarse por qué no existían medidas de seguridad para impedir el uso de la función de conducción autónoma sin una persona en el asiento del “conductor. Dado que algunos vehículos ni siquiera arrancan si la persona en el asiento del” conductor no lleva puesto el cinturón de seguridad, parece una medida de seguridad relativamente sencilla de implementar, especialmente teniendo en cuenta que es razonable suponer que este desenlace es bastante probable, con personas deseosas de probar una función de “conducción autónoma”. Aunque es posible que Tesla no se enfrente a ninguna responsabilidad, será interesante observar si añaden medidas de seguridad pertinentes para evitar que esta función se utilice de manera incorrecta y potencialmente fatal.
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